martes, 18 de junio de 2019


EN TUMEREMO PROFANAN CAPILLA DE “SAN ANTONIO”


Tumeremo.-(Especial).- En la mañana de hoy, cuando el párroco de Tumeremo,Presbitero José Gregorio Contreras, acudió al recinto de la capilla de San Antonio de Padua, con el fin de organizar los preparativos para la celebración de las festividades en honor a San Antonio de Padua, se encontró con la desagradable sorpresa que el sagrado recinto  había sido profanado, pues, una señora que se encontraba en el sitio, y en forma altanera, y amenazante  se abrogo la propiedad de la Capilla, la enfurecida señora procedió en presencia del sacerdote y otros feligreses arrojar a la calle bancos y otros ornamentos sagrados. 
La rápida y efectiva intervención de los funcionarios Policiales.de José Atienza, Presidente del Concejo Municipal y funcionarios de la Dirección  de Catastro, adscrito a la Alcaldía de Sifontes, como así también  un numeroso grupos de vecinos quienes se apersonaron y en forma contundente   rechazaron este vulgar e insólito suceso, solucionaron favorablemente el enojoso hecho, el cual causó alarma y reproche en toda la colectividad tumeremenses, por cierto hecho este  sin precedente en los anales histórico de Tumeremo.
Una vez que la funcionaria de la Dirección de Catastro, constató que la edificación es propiedad de la Parroquia Nuestra Señora de Belén de Tumeremo; mediante acta levantada al respecto, y debidamente firmada por los vecinos presentes, se le hizo formal entrega y posesión del bien mueble  al Padre José Gregorio Contreras, Párroco de Tumeremo.-
Es de hacer constar que  la Capilla de “San Antonio de Padua”, fue construida en los albores del año de 1935, cuya edificación está ubicada en la esquina de la calle Piar, cruce con la Avenida Sifontes, el cual representa para los feligreses católicos de Tumeremo, el lugar sagrado para rendirle culto al Santo “Milagroso San Antonio” e interceder favores y beneficio para sus devotos. “San Antonio”. Uno de los milagros más famosos de su vida es el de la mula: quiso uno retarle a San Antonio a que probase con un milagro que Jesús está en la Santa Hostia.
El hombre dejó a su mula tres días sin comer, y luego cuando la trajo a la puerta del templo le presentó un bulto de pasto fresco y al otro lado a San Antonio con una Santa Hostia. La mula dejó el pasto y se fue ante la Santa Hostia y se arrodilló.