MISCELANEAS DE TUMEREMO
Rafael “Chino” Velázquez
Rafael.velazquez.a@gmail.com
ANARQUIA TOTAL
No existe otra forma de identificar a Tumeremo. La anarquía predomina
en todo el ámbito territorial de la Parroquia Capital. Calles y avenidas que
representan el colorido de un pueblo donde impera la Ley del más fuerte.
Para desplazarse de un lado a otro se requiere de mucha paciencia y
cuidado, de lo contrario va directo a un centro asistencial o en su defecto le
depara el sueño de los justos. Es con carácter de urgencia la aplicación de la
normativa establecida en Ley de Transporte Público Terrestre o su defecto alguna Ordenanza Municipal, que mantenga a
raya el descomunal descontrol que ocasionan el transito automotor.
Enfatizamos de manera
“Campechana”, o mejor dicho; como lo dice la metáfora, “cada quien hace lo que
le viene en gana”. Hace poco tiempo se contaba con algunos semáforos, eran una
gran ayuda para medio controlar el transito. Se dañaron, cuyos restos se erigen
como un símbolo a la desidia. Ningún organismo oficial se ha dignado en
repararlos.
Lo cierto es que cada segundo se generan tremendos “Carajazos”,
producto del desconocimiento de los procedimientos reglamentarios. Entonces
“Juan Bimba”, se pregunta ¿Qué autoridad es la competente para poner orden y, terminar de una vez con este despelote ¿ Hasta
cuándo tanta indolencia. Tumeremo merece
otra imagen, donde impere el respeto mutuo y sus habitantes reciban
solución oportuna, e inmediata de los
innumerables problemas que afectan al colectivo Sifontenses.
Por otra parte es necesario
señalar que la Ley de Transporte Público Terrestre, en su Titulo II, Capitulo
I, Disposiciones Generales, articulo 18, establece la competencia en cuanto a
los Órganos de Ejecución. El alcance jurídico del inciso 2º de la referida Ley,
dice lo siguiente: “Los cuerpos de policías: nacional, municipales y estadales
debidamente homologados a esta ley. Tengan dentro de sus funciones el control
de la operación del transporte terrestre; y el inciso 3º, establece claramente
las competencias de esta manera: La Fuerza
Armada Nacional, que podrá actuar como órgano ejecutor de la presente
ley, sin perjuicio de las funciones que deban realizar los organismos
policiales y de ejecución anteriormente
indicados. La normativa es clara en cuanto
son estos organismos, quienes tienen la autoridad competente para el
control de la circulación del tránsito. Es menester señalar que ya es hora, de aplicarlas medidas
necesarias para lograr minimizar el
despelote Vial”, que a diario se produce en Tumeremo….¡¡¡.MANOS A LA OBRA….!!!!
SECTOR “LA PAZ” SE HUNDE EN EL OLVIDO
“La Paz” y “Punta Brava”, dos populosos e históricos sectores que
conforman a Tumeremo. Sus habitantes
padecen en carne propia las vicisitudes del destino, pues; durante muchos años
ha tenido que afrontar diversos problemas que
los afectan a todos lo que allí residen .Las calles, si es que pueden
llamarse calles, no son otras que una vertiente de aguas putrefactas donde la
fetidez y la contaminación amenazan la salud de todos. A lo largo y ancho de
ambos sectores se visualiza el reflejo del caos, el abandono y la desidia, como
genuino acontecer de aquellos ofrecimientos electorales, y que hoy en día se
encuentran en los “Archivos de las Cosas Olvidadas”.-
GENERAL ANSELMO ZAPATA AVILA
En un agreste y solitario sitio de cierta
zona que riega el rio Yuruari, emporio aurífero de nuestra prodigiosa Guayana,
tierra de misterio y leyenda, duerme su sueño eterno este bizarro y valiente
General guayanés, cuya vida, paradigma de alteza moral y masónica, quien
discurrió inestable y dinámica en todas partes; no en vano, hombre que se
hombreaba con su propio destino, cambió siempre confiado, resuelto y sin miedo
en distintos horizontes, aunque lo asediaran las peligrosidades, llanero de
fuste y soldado aguerrido, fatigó los reclamos del recio ajetreo sabanero
y,asimismo,las urgencias insoslayables del vivac durante discurriera la
campaña.
El trabajo, la política y también la guerra, ocuparon los mejores años
de la digna vida de ese ilustre masón el General Anselmo Zapata Ávila, quien en
disímiles actividades le ocupó demostrar dones excepcionales de hombre honrado,
leal y valeroso en extremo.
Gobernador del Territorio
Federal Yuruari, o Presidente del Estado Bolívar, mantuvo su actuación
enmarcada en la ley, rectitud integral que nada ni nadie pudro quebrantar
nunca, ni aún él mismo influido por su carácter impulsivo, proclive del
arrebato en circunstancias de ingrata procedencia.Contrariramente a lo que
podía esperarse de parte suya, toleró, a veces, lo intolerable, y hasta fue
magnanime cuando le asistía justicia para imponer castigo. Y en lo concerniente
a ejemplar honradez administrativa, tratándose del General Zapata Ávila, basta
decir que no hay fundamento posible para responsabilizarlo ni siquiera del más
mínimo caso de peculado